El salario emocional es el tema que vamos a tratar en el artículo de hoy. Para empezar, se define salario emocional como el conjunto de factores o beneficios del trabajo que no son estrictamente el sueldo contante y sonante. Veremos que el salario emocional es uno (aunque no el único) de los factores de motivación de las personas en su trabajo.
Salario emocional y motivación
Al hablar de motivación laboral el marco mental clásico que se suele usar es la jerarquía de las necesidades de Maslow, la típica pirámide con la supervivencia en la base y la autorrealización en la cúspide (https://es.wikipedia.org/wiki/Pir%C3%A1mide_de_Maslow), con seguridad, afiliación y reconocimiento jerarquizadas entre uno y otro extremo. Sin embargo, este modelo de 1934 aunque es útil, no ha de tomarse al pie de la letra. Incluso el propio Maslow hablaría más tarde de la metamotivación, una fuerza que nos mueve profundamente y que está más allá del esquema jerarquizado.
El salario emocional se suele asociar con la parte superior de la pirámide de Maslow: la autorrealización, el reconocimiento y la afiliación, mientras que el salario en líquido y el contrato estarían relacionados con las básicas (la seguridad y los aspectos fisiológicos como comida, abrigo y descanso). Pero hemos de tener en cuenta que la jerarquía de necesidades de Maslow no define por completo lo compleja que es la motivación humana: no suele haber un solo motivo claro para la acción, ni todas las personas jerarquizan estos conceptos de la misma manera.
Cuando el salario no lo es todo
Por otra parte, es difícil aplicarle esta pirámide a las personas con una fuerte vocación por su trabajo, tanta que puede llevarles a renunciar a la totalidad de los escalones de la misma con tal de seguir adelante. Puede sonarnos heroico pero hay gran cantidad de profesiones que requieren renunciar a un cierto grado de aspectos de la base para llevarlas a cabo: pensemos toda persona que trabaja en turno nocturno (no solo profesionales sanitarios, pero incluidos), en condiciones de peligrosidad física (el cuerpo de bomberos o cualquier fábrica) o mental (no solo los centros psiquiátricos, sino también todas las escuelas primarias).
Por qué debes ofrecer salario emocional
Para las ocasiones en las que el dinero no es un problema o no es lo más importante, y para aquellas en las que la vocación flaquea o bien se ha abusado de ella, es trabajo de la gestión de la empresa asegurarse de que el salario emocional sigue elevando no sólo el ánimo, sino la capacidad de trabajar de la plantilla de la empresa. Al ofrecer salario emocional aumentan los siguientes factores de optimización de la empresa:
- Eficiencia en el gasto. A partir de una determinada cantidad de dinero deja de ser un factor motivante o de mejorar proporcionalmente la calidad de vida de las personas. Redistribuir los fondos puede llevar a un aumento superior de la calidad de vida del personal.
- Alta retención. Un alto salario emocional permite que la plantilla se quede más tiempo en en la empresa.
- Elevada productividad. Una alta retención aumenta la eficiencia de los procesos, al contar con personas experimentadas.
- Alta satisfacción laboral. Además, el trabajo bien hecho es en sí un factor de motivación. Al crear las condiciones para hacer bien el trabajo, el propio trabajo bien hecho actúa como motivación adicional.
- Baja rotación. Una baja rotación lleva consigo ahorro en selección de personal y su consiguiente formación.
¿Te hemos convencido ya para dedicar parte de tu presupuesto al salario emocional? Pues sigue nuestro blog porque en nuestro próximo artículo te daremos gran cantidad de ideas aplicables a tu empresa sobre cómo ofrecer a tu plantilla un salario emocional que optimice tanto el día a día como la cuenta de resultados.