El nuevo concepto de trabajo plantea conceder a sus empleados libertad para escoger dónde y cuando se quiere trabajar, alejando la idea de viejas costumbres como el presencial en la oficina.
Las grandes empresas de Estados Unidos y Europa están abogando por una nuevo concepto de trabajo para sus empleados, poder elegir dónde quieren trabajar y como quieren hacer-lo. Recientes estudios de trabajo demuestran que la persona puede vincular su vida personal y su vida profesional se convierte en una mayor productividad en el trabajo.
En un principio puede ser ventajoso este tipo de trabajo ya que el empresario lo que quiere es que sus empleados rindan lo máximo posible.
Aún así podemos encontrar ciertas barreras de entrada, ya que en principio esta posibilidad solo para esos trabajadores de servicios o de áreas no físicas de las compañías por ejemplo, ingenieros y comerciales que suelen trabajar por proyectos y pueden ser más flexibles.
Encontrar y seleccionar personas para ocupar sitios de trabajo claves en la empresa es una tarea que en algunas ocasiones nos puede resultar complicada, por ese motivo tenemos empresas especializadas en el análisis de candidatos tanto propios como externos.
La tercerización de muchas de las tareas que se realizan en empresas de servicios permite la flexibilidad que nos puede dar un mayor rendimiento y a consecuencia ahorro de tiempo y dinero.