El proceso de selección de personal es complejo y merece de su requerido tiempo, recursos y capital humano. Va mucho más allá de una entrevista de trabajo. Se realizan test psicológicos laborales, test de competencias, de conocimientos… Hay una variedad de pasos a seguir durante todo el proceso.
Hoy vamos a presentar algunas de las pruebas más utilizadas durante la selección de personal, cuando se intenta contratar a los perfiles más adecuados para cada puesto. Lo más recomendable es que esta búsqueda quede en manos de especialistas en reclutamiento y en recursos humanos, para que puedan buscar al talento más idóneo.
Los test psicológicos laborales, que son los que vamos a presentar, se realizan con un objetivo claro: evaluar el potencial de los candidatos. Es clave para ver si sus características se adaptan con el puesto de trabajo y el clima de la empresa. También sus valores.
Algunas de las pruebas que se tienen en cuenta son:
- Las pruebas profesionales
Se trata de evaluar las habilidades y los conocimientos para ver su nivel de experiencia, formación, desempeño… las diseñan las empresas según los requisitos de cada puesto de trabajo. Algunos ejemplos son las pruebas de programación informática o los ejercicios de contabilidad.
- Los psicotécnicos
En este caso, se trata de evaluar las capacidades cognitivas de cada candidato a través de unos problemas que se tienen que resolver con un límite de tiempo. Es la manera de detectar cómo trabaja la persona en concreto bajo presión. Hay distintos tipos de este test.
- Los de personalidad
Es la forma de conocer a la persona en su manera de ser. Sirve para ver si se adapta a las exigencias del puesto y puede insertarse bien. En este caso hay dos tipos: del de personalidad introspectiva y el de personalidad proyectivo.
- Dinámicas de grupo
Este tipo de prueba no está tan extendida ni es tan utilizada como las demás, pero brindan información muy valiosa sobre competencias, personalidades, capacidad de trabajo en grupo… Es la manera de evaluar distintas personas a la vez.
Según Bizneo, el 46% de los currículums contienen alguna “media verdad” y el 80% una falsedad. Esto complica el encontrar al candidato perfecto. Por ello, son tan necesarias estas pruebas para poder completar la primera impresión o el primer CV que se recibe.