Realizar un proceso de selección y tomar las decisiones de contratación del personal es una tarea importante que requiere de tiempo y dedicación. Este proceso determinará cuál es la persona más idónea para el puesto de trabajo en cuestión y el encargado de recursos humanos tiene un papel importante en ello.
Como profesional debes ahorrarte dolores de cabeza, tiempo y dinero. Es por esta razón que debes estar atento de todos los errores típicos que se pueden cometer a la hora de buscar nuevos talentos.
- No buscar primero dentro de la empresa
A veces nos centramos únicamente en buscar candidatos fuera de la organización, pero deberíamos valorar la posibilidad de buscar dentro de nuestro equipo.
- Publicar una vacante poco realista
No se pueden ofrecer condiciones que no se van a cumplir finalmente.
- Ser ambiguo en el proceso de selección
Desde el primer momento se debe explicar claramente el puesto de trabajo y especificar las tareas que se van a realizar.
- No considerar las habilidades blandas
No es recomendable centrarse únicamente en sus habilidades profesionales, la inteligencia emocional es muy importante también en un candidato.
- No representar a la organización de manera adecuada
Deben quedar claros los valores empresariales y la cultura de la organización durante todo el proceso. El candidato querrá trabajar en una empresa donde sus valores y los de la misma se alineen.
- No informar sobre las etapas del proceso
El candidato debe estar informado sobre todas las pruebas que va a pasar durante este proceso de selección. De lo contrario esto puede causar mala imagen de la compañía.
- No implicar al equipo ni preparar las entrevistas
Los trabajadores saben perfectamente lo que se necesita en el puesto de trabajo vacante. Es importante que se les pida opinión y ayuda a la hora de valorar distintas opciones. Además, es esencial prepararse para las entrevistas porque puede acabar con una mala decisión.
- No respetar el tiempo de reflexión
El profesional de RRHH debe esperar un tiempo para pensar bien cuál es la mejor opción y no tomar una decisión precipitada.
Estos errores son remediables si se ponen los medios adecuados. Seguir cometiéndolos puede provocar una mala reputación para la empresa, a la vez que se verán afectados también sus resultados empresariales.
