El cambio es un proceso por el que todas las empresas en un momento u otro deben pasar. Aquellos amantes de la rutina y la estabilidad se sienten aterrorizados con solo pensar en él, pero las empresas deben adaptarse o morir. La pandemia reflejó claramente esta necesidad.
La resiliencia, la empatía y la capacidad de adaptación son claves para hacer frente a cualquier cambio. El proceso de adaptarse es lento, pero puede ser muy productivo si se hace de la mejor forma. Las decisiones, en primer lugar, siempre tendrán que estar tomadas pensando en las personas.
Los líderes deben estar predispuestos al cambio, ser conscientes de las virtudes que tiene esta situación. Un correcto proceso de transformación requiere de tres aspectos:
- Sensibilización
- Motivación
- Movilización
No solo en las empresas, la vida en general también nos propone nuevas situaciones a las que hacer frente y, en muchos casos, estas generan cierto vértigo. ¿Cuál es la mejor manera de adaptarse al cambio?
- Ser conscientes de que todo cambia constantemente
- Evitar la negación
- Practicar la flexibilidad mental
- Realizar mindfulness y meditación
- Aceptar los cambios
En muchos casos, salir de la zona de confort es complicado. La rutina resulta conocida y salir de ella puede ser difícil. Las empresas necesitan a líderes optimistas, proactivos y flexibles que puedan guiar a las plantillas a ser mejores cada día adaptándose a los cambios que vienen.
OBS nos da algunas claves para adaptarse con éxito:
- Reconocer los escenarios de cambio y ser conscientes
- Actuar en concordancia
- Conocer al máximo la nueva situación
- Ser flexible
